Con 55 extranjeras en la historia de la postemporada, La Liga Femenina confirma su poder de atracción. En sus doce ediciones ya aglomeró a 19 países y se consolidó como un espacio competitivo a nivel internacional. Estados Unidos lidera el ranking.
Cada postemporada tiene sus nombres propios, estrellas particulares que sirven como punto de partida para analizar la influencia, la incidencia y el impacto detrás de la significativa contratación de jugadoras extranjeras en La Liga Femenina. A lo largo de las distintas ediciones, un total de 55 deportistas nacidas en el extranjero disputaron esta instancia, incluso cuando algunas de ellas obtuvieron la nacionalización con el paso del tiempo.
Estados Unidos encabeza el listado de nacionalidades con 14 representantes, consolidándose como la principal cantera de refuerzos. España sigue en la tabla con 7 jugadoras, mientras que Colombia completa el podio con 5. En total, 19 países aportaron talento a la competencia, enriqueciendo el panorama con distintas escuelas de juego. Dentro de los países menos habituales que han dicho presente en la Liga, aparecen naciones europeas como Letonia, Montenegro y Serbia, lo que evidencia la capacidad del torneo para atraer perfiles con recorrido internacional.
La única representante con raíces africanas fue Ugochi Nwaigwe, oriunda de Estados Unidos, aunque con pasaporte de Nigeria en reconocimiento a su ascendencia y raíces familiares. Otro caso singular es el de Imani Tate. Nació en diciembre de 1995 en Islas Vírgenes, un territorio no incorporado de Estados Unidos que, pese a su estatus, cuenta con un selectivo nacional propio para las competencias de FIBA y con ella como figura de varias AmeriCup y de Campeonatos de Centrobasket. Considerando este contexto, Asia y Oceanía son los únicos continentes que aún no tuvieron presencia en la postemporada argentina.
Si el análisis se centra en la actualidad, los playoffs 2025 cuentan con 9 jugadoras nacidas fuera del país, quienes representan a un abanico de selecciones de distintas latitudes: Luna Cao (Alemania), Margareth Padilla (Bolivia), Javiera Campos (Chile), Alejandra Alonso (Colombia), Ema Baldo (España), Paloma Niz (Paraguay), Karla Sarit (República Dominicana), Joaquina Gregorio (Uruguay) y Norcaris Ianagas (Venezuela).
Desde la perspectiva de la regularidad, Alejandra Alonso ostenta el récord de mayor participación en playoffs, con 12 presencias desde 2018, siendo la única excepción la temporada inaugural de 2017. La escoltan Margareth Padilla, con 6, y Josefina Zeballos, con 5, todas provenientes de Sudamérica, reafirmando el arraigo de la competencia con la región.
A lo largo de la historia de la Liga, nueve extranjeras lograron consagrarse campeonas. La única en repetir el título hasta el momento fue Adijat Adams, mientras que el resto celebró en una ocasión: Alejandra Alonso, Doris Lasso, Ivaney Márquez, Luna Cao, Marta Tudanca, Mabel Martínez, Ronni Williams e Yosimar Corrales. Sin embargo, en esta temporada, Alonso y Cao tienen la oportunidad de sumarse a la interna norteamericana como las únicas en levantar el trofeo más de una vez.
En cuanto a las instituciones que más recurrieron al talento extranjero en la fase decisiva, Obras Basket lidera la nómina con 16 fichas en estas ocho temporadas, seguido por Quimsa con 10. Más atrás, 16 clubes sumaron refuerzos universales en busca de potenciar su plantel para la lucha por el título.
El creciente protagonismo de jugadoras foráneas en los momentos decisivos de La Liga Femenina refleja el proceso de internacionalización del certamen y su consolidación como un escenario atractivo para figuras de distintos rincones del mundo.