En la pasividad absoluta de ese aislamiento, varios participantes aprovecharon el tiempo ocioso que abunda para analizar la personalidad de Rosina. En una especie de mesa redonda de opiniones, todos coincidieron en que la uruguaya oculta algún tipo de trastorno.
La situación se produjo en el living de Gran Hermano, durante una charla, en la tarde, que mantuvieron Martín Ku, Furia, Catalina, Virginia y Mauro, la que amenizaron con una ronda de mates. Ahí focalizaron en la morocha y sus actitudes, principalmente en su energía interminable.
La aliada de Juliana Scaglione recordó esa tendencia de Beltrán a solicitar cobijo en sus compañeros durante las noches y la reacción de Isabel. “Cuando se acostaba con Isabel en la primera edición…Mientras ella dormía decía ‘Isa, ¿me puedo acostar con vos?’. ‘Estoy durmiendo’ le gritaba”.
Por su parte, Furia aportó a la conversación la advertencia a una de las ingresantes rezagadas: “Bueno a Virginia le dijimos, tené cuidado porque se te va a acostar, es una hincha pelotas”. A lo que la más longeva manifestó: “Sabe que yo quiero dormir sola, que no me rompan los huevos«.
FURIA ASEGURÓ QUE ROSINA TIENE UNA ENFERMEDAD OCULTA
El Chino ponderó la intensidad que le sale de los poros a Rosina y lanzó :”Es que está muy ATR (a todo ritmo), se escuchan los gritos hasta acá«. Así llegó la definición más cruda, que provino, como no podía ser de otra manera, de Furia que catalogó a Beltrán con una fuerte aseveración.
“O tiene una patología, o es así, o está actuando, pero bueno”, bramó la doble de riesgo. No obstante, su amiga Catalina la contradijo: “Actuando durante tres meses es mucho, no creo«. Y después se preguntó sobre el origen de la electricidad constante de la uruguaya: “Yo no puedo entender cómo está tan contenta todo el tiempo”.